Recinto de Inmortales

Historia del Recinto de los Inmortales del Béisbol Aficionado Puertorriqueño

Con fecha del día 6 de abril de 1983, en la ciudad de Guaynabo, se reunieron 22 deportistas y amantes del béisbol aficionado con el legítimo interés de honrar, distinguir y premiar aquellos héroes, personalidades y luminarias que de manera desmedida han aportado al engrandecimiento del que muchos llaman el béisbol más regionalista del mundo. Constituidos como miembros fundadores nace el ilustre Recinto de Inmortales del Béisbol Aficionado Puertorriqueño.

Desde tal fecha, año tras año y en diferentes ciudades y pueblos del país, un grupo de deportistas se dan a la tarea de rendir máximo honor y reconocer las brillantes ejecutorias de jugadores, y los sacrificios y esfuerzos de propulsores, que según transcurre el tiempo van dejando su reconocía huella.

No existe lugar a dudas de que los miembros de este recinto han logrado su ingreso por derecho propio y sobresalientes méritos. Pero lo más que debe exaltar nuestra satisfacción es que todos cuentan con intachable reputación y con la virtud de que pueden ser reconocidos y recordados como ciudadanos ejemplares de nuestra sociedad puertorriqueña.

En cuanto a la trascendental importancia de este sagrado recinto, representa nuestro más preciado cofre de tesoros y valores. En él se guardan interesantes historias, ricas y exquisitas vivencias e inolvidables recuerdos que se distinguen y se unen a ese selecto núcleo de características que enaltecen nuestra cultura, nacionalidad e identidad puertorriqueña.

Miembros Fundadores del Recinto

Recinto de Inmortales del Béisbol Aficionado

Lcdo. Julio E. Cora

Presidente

Comité de Exaltación

Lcdo. Osvaldo L. Gil

Sr. Pedro C. Lugo

Sr. Luis A. Feliciano

Presidente

Miembro

Miembro

Presidentes de Honor